Sostenibilidad: 10 sucesos en 2020. Segunda parte

En la segunda parte de la serie, presentamos otro conjunto de sucesos que posiblemente influenciarán las estrategias de sostenibilidad corporativa en 2021.

6. Más mujeres en los gobiernos.

Este 2020, se reportó un incremento en el porcentaje de mujeres en posiciones de liderazgo en los gobiernos a nivel mundial, con un 25% de mujeres ocupando posiciones en los parlamentos nacionales (OECD). En México este avance fue aún mayor, consiguiendo un 49%. Esto sin duda es un avance significativo, pero todavía hay mucho camino que recorrer para alcanzar la equidad de género.  En el ámbito laboral, en nuestro país todavía hay una desigualdad salarial de género del 13% (OECD). Además, solo el 8% de las mujeres alcanzan promociones laborales para puestos de vicepresidencia y 3% a nivel del comité ejecutivo, en comparación con el 21% y 18% de los hombres. Algunas estrategias que ayudan en estos temas incluyen programas de liderazgo para mujeres, programas de mentoría, diseño y seguimiento de indicadores de género, entre otras.

7. Una década para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Al iniciar el segundo año de la llamada ´década de acción’, en el reporte de progreso de las Naciones Unidas se observa que de las 21 metas que tenían fecha límite en el 2020, únicamente 3 se han logrado o se encuentran en curso para lograrse.  Además, a pesar de que durante este año más empresas vincularon sus actividades y reportaron respecto a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, todavía una mayoría no integra de manera estratégica los ODS ni vincula sus actividades a las metas específicas de la Agenda 2030. ¿Qué quiere decir esto? que muchas de las actividades que se reportan como contribución a los ODS, posiblemente no estén aportando mucho al avance a las 169 metas de la Agenda 2030.  El COVID-19, ha puesto pausa a muchas iniciativas, ha relegado algunas prioridades, y ha intensificado algunas problemáticas como la desigualdad y la pobreza, por lo que los próximos años se requerirán acciones más contundentes y una mayor alineación de las estrategias de negocios a la Agenda 2030 si queremos ver mayores avances.

8. Las inversiones ESG demuestran su valor.

Este año, la Bolsa Mexicana de Valores y S&P Dow Jones Indices, anunciaron un nuevo índice S&P/BMV Total Mexico Index, varios países latinoamericanos han lanzado productos similares. La tendencia se da en un contexto en el que el Covid ha demostrado que las empresas mejor preparadas respecto a aspectos sociales, ambientales y de gobernanza (ESG) han tenido un mejor desempeño durante la pandemia.  De acuerdo con un estudio de Fidelity International, las acciones (stocks) con mejores calificaciones ESG se comportaron mejor que las que obtuvieron notas más bajas. Esto demuestra de forma contundente, que considerar aspectos sociales y ambientales en la toma de decisiones y estrategias de las empresas reditúa no solo en términos reputacionales sino en un mejor desempeño empresarial. Por esta razón los inversionistas cada incluirán cada vez más en sus portafolios, a empresas con fuertes credenciales ESG.

9. Adiós a Trump.

Una de las primeras acciones del presidente Trump al llegar a la Casa Blanca fue abandonar los Acuerdos de París, mala señal para la sostenibilidad. Además, durante su mandato revocó varias regulaciones relacionadas a la protección del medio ambiente y promovió el resurgimiento la industria del carbón. En suma, dio reversa a muchos avances en materia ambiental y de desarrollo sostenible.  En la elección de noviembre pasado, la población estadounidense decidió [afortunadamente] un cambio de rumbo y el nuevo mandatario electo, Joe Biden ha refrendado su compromiso con la energía limpia y los acuerdos internacionales para combatir el cambio climático.  Una de sus primeras acciones dice que será la re-adhesión a los Acuerdos de París y quiere una recuperación económica ‘verde’. Por lo tanto se proyecta que cada vez se requiera mayor transparencia sobre las emisiones de las empresas y que haya más oportunidades de negocio en el área de energía limpia.

10. Bienestar laboral y la NOM-035.

En octubre 2020 entró en vigor en México, la segunda etapa de la norma NOM-035 que aborda los factores de riesgos psicosocial en los entornos laborales.  La Organización Mundial del Trabajo y el gobierno mexicano llevaban ya tiempo trabajando en estos temas debido a la problemática mundial de la salud mental. Este tipo de regulaciones se están implementando en muchos países y buscan identificar, analizar y prevenir los factores que afectan el bienestar psicosocial de los trabajadores.  En un país como México en el que se tienen los índices de obesidad más altos del mundo debido entre otros factores a la inactividad física o en el que casi un tercio de la población económicamente activa, trabaja jornadas de más de 50 horas semanales, la NOM-035 debe verse como una invitación a que las empresas cuiden a sus colaboradores y promuevan entornos de mayor bienestar. La salud mental y sus factores de riesgo, también han sido afectados por la pandemia y se espera que la NOM-035 cobre más relevancia.

Anterior
Anterior

Cuatro datos que no debes olvidar en tu estrategia de sostenibilidad

Siguiente
Siguiente

Sostenibilidad: 10 sucesos en 2020. Primera parte